martes, 6 de agosto de 2013

Felices 17.

                Aquí estoy, como hace tres años, como que es el tercer cumpleaños juntas, como que son tus 17, como que eres lo que más quiero.
                Felicidades por tercera vez y, como ya sabemos, a la tercera va la vencida y a esta tercera, nos ha pasado de todo y si aún así nos tenemos, que les jodan, nos sobran terceras veces y el ‘para siempre’ se nos queda pequeño. Porque queda tanto para darte, quedan tantas cosas juntas, queda tanto reír, tanto llorar, tanto compartir silencios y tanto sudar que me da igual lo que venga si estás de mi mano.
                Aprovecho hoy, la última media hora de tu cumpleaños, para darte las gracias un poco más de lo que las doy cada día; por todo, sin precedentes, sin excusas, sin ‘pero’, sin trampa ni cartón, porque viniste aportándome lo que me faltaba. Y de verdad, que bendigo ese jodido septiembre y estos tres años que no valen más que para sumar alegrías, porque me tiraría con los ojos cerrados si sé que me esperas abajo.
                En cuanto a esta felicitación, un año más, en pantalla de ordenador y sin 5 párrafos en italiano, pero dudo que al cartero le interesara llevar esto a Málaga y que llegara en algo más de 15min, pero ya sabes que hasta desde la distancia, te noto como si estuvieras aquí pero a la vez te echo en falta tanto como si estuvieras en la otra punta de la galaxia. Y, bueno, a lo mejor este no ha sido el mejor verano de nuestras vidas, pero de eso se trata, seguir creciendo de la mano, como si de cadenas se trataran, porque queda mucho por viajar, ya sabes, tu regalo te espera.
                Hasta aquí tu felicitación de cumpleaños, la tercera de muchas y tus únicos 17, disfrútalos.

Si no tuviera nada te tendría a ti y si tuviese algo, que les jodan, sería nuestro.


Felicidades Sara, te quiere tu raggazza a 593km más al norte.